viernes, 27 de diciembre de 2019
viernes, 15 de noviembre de 2019
Su luz Luces que no confunden, luces que te guían y guardan de las tinieblas más inciertas. Luces, que vienen al rescate oportuno. Pensamientos claros y ánimos bien encaminados. Anhelos que con fe genuina convierten el llanto y la pena en incólume esperanza. Luces, farolas que aún en la densa neblina levantan las manos cansadas. Y, como a Moisés o a Elías bañan de gracia el corazón temeroso e inseguro. Luces que hoy te dicen: !No temas! Isaías 41:10 No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. -SAC
No te rindas
domingo, 6 de octubre de 2019
martes, 1 de octubre de 2019
*Es una enfermedad* La envidia es esa enfermedad del alma que envenena el espíritu. Es como un tumor que CONTAMINA todo lo que encuentra a su paso. Pido a Jesús nos dé sabiduría y plenitud de gozo para que nunca seamos seducidos por tan terrible forma de vivir. Recuerda , EL TENER ENVIDIA SOLO TRAE AMARGURAS Y MUCHO DOLOR. La envidia es una enfermedad... 1 Co13:4 El amor es paciente, es bondadoso; el amor no tiene envidia... -SAC
Es una enfermedad...
sábado, 28 de septiembre de 2019
viernes, 30 de agosto de 2019
En sus manos
*Aún en tierra seca*
En las manos del Señor es donde más seguro estoy. Allí los temblores de tierra no amenazan la PAZ que Jesús ha puesto. En las manos de Jesús, en sus amables manos vivo. No hay tormenta, no hay enfermedad, no hay tribulación que marchite esta esperanza abundante.
Es así, una esperanza que teje en mis entrañas muchas ganas de vivir. Un piano que recita un poema que hace que nazcan flores aún en tierra seca. Plenitud de gozo.
En las manos del Señor vivo.
-SAC
lunes, 26 de agosto de 2019
domingo, 21 de julio de 2019
sábado, 1 de junio de 2019
Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna. 1 Juan 5:20
Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.
1 Juan 5:20
domingo, 12 de mayo de 2019
¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada? Romanos 8:34-35
No te RINDAS
martes, 2 de abril de 2019
viernes, 4 de enero de 2019
Habla con Dios
Comparto con ustedes parte de lectura diaria en el devocional individual de madrugada. Orar y leer la Palabra de Dios trae bendición abundante a nuestras vidas.
Nehemías 6:1-16
Cuando oyeron Sanbalat y Tobías y Gesem el árabe, y los demás de nuestros enemigos, que yo había edificado el muro, y que no quedaba en él portillo (aunque hasta aquel tiempo no había puesto las hojas en las puertas), Sanbalat y Gesem enviaron a decirme: Ven y reunámonos en alguna de las aldeas en el campo de Ono. Mas ellos habían pensado hacerme mal. Y les envié mensajeros, diciendo: Yo hago una gran obra, y no puedo ir; porque cesaría la obra, dejándola yo para ir a vosotros. Y enviaron a mí con el mismo asunto hasta cuatro veces, y yo les respondí de la misma manera. Entonces Sanbalat envió a mí su criado para decir lo mismo por quinta vez, con una carta abierta en su mano, en la cual estaba escrito: Se ha oído entre las naciones, y Gasmu lo dice, que tú y los judíos pensáis rebelaros; y que por eso edificas tú el muro, con la mira, según estas palabras, de ser tú su rey; y que has puesto profetas que proclamen acerca de ti en Jerusalén, diciendo: ¡Hay rey en Judá! Y Ahora serán oídas del rey las tales palabras; ven, por tanto, y consultemos juntos. Entonces envié yo a decirle: No hay tal cosa como dices, sino que de tu corazón tú lo inventas. Porque todos ellos nos amedrentaban, diciendo: Se debilitarán las manos de ellos en la obra, y no será terminada. Ahora, pues, oh Dios, fortalece tú mis manos. Vine luego a casa de Semaías hijo de Delaía, hijo de Mehetabel, porque él estaba encerrado; el cual me dijo: Reunámonos en la casa de Dios, dentro del templo, y cerremos las puertas del templo, porque vienen para matarte; sí, esta noche vendrán a matarte. Entonces dije: ¿Un hombre como yo ha de huir? ¿Y quién, que fuera como yo, entraría al templo para salvarse la vida? No entraré. Y entendí que Dios no lo había enviado, sino que hablaba aquella profecía contra mí porque Tobías y Sanbalat lo habían sobornado. Porque fue sobornado para hacerme temer así, y que pecase, y les sirviera de mal nombre con que fuera yo infamado. Acuérdate, Dios mío, de Tobías y de Sanbalat, conforme a estas cosas que hicieron; también acuérdate de Noadías profetisa, y de los otros profetas que procuraban infundirme miedo. Fue terminado, pues, el muro, el veinticinco del mes de Elul, en cincuenta y dos días. Y cuando lo oyeron todos nuestros enemigos, temieron todas las naciones que estaban alrededor de nosotros, y se sintieron humillados, y conocieron que por nuestro Dios había sido hecha esta obra.