lunes, 16 de febrero de 2015

*No todo está perdido*

*NO todo está perdido*

A veces las cosas parecen no tener salida. Parecen y dan la segura impresión de que todo está perdido. Una familia en donde el padre está enfermo de sífilis y su esposa tiene tuberculosis. Han tenido cuatro hijos: uno falleció, los otros tres también están enfermos de una enfermedad terminal. Queda nuevamente encinta la mujer y no sabe si abortar la criatura que viene en camino… ¿Qué harías?

Estoy casi seguro que muchos de mis lectores hubiesen optado por el aborto. Ojala me equivocase. Y sin embargo amados… Si supieras que esta familia fue la familia de Beethoven. Sí, la criatura aun por nacer fue el genio de la música clásica. Uno que aún quedándose sordo compuso innumerables joyas musicales. Te digo amada, mi amado hermano; ¡NO todo está perdido!

Romanos 8: 28 – Y sabemos que a los que aman a DIOS, todas las cosas les ayudan a BIEN…


Serafín Alarcón Carrasquillo - tablitas del Señor​ / tablitas1.blogspot.com

domingo, 15 de febrero de 2015

*Sin JESUCRISTO nada*

*Sin JESUCRISTO nada*

Cada día que pasa me doy cuenta que quien merece toda la alabanza es DIOS. Sí, solo Él como motor generador de aquello que hacemos con fe y con entrega para el Reino. Después de todo, Él nos da los dones y la inspiración necesaria para hablarle a otros de su AMOR y de su GRACIA.

Es un privilegio, uno que nos queda demasiado grande. Amados, este oficio de ser mensajeros del Rey de reyes pone sobre nuestros corazones una responsabilidad extrema. Responsabilidad de llevar un mensaje claro y sobre todo bíblico. Confieso que mi alma en muchas ocasiones arde cuando empiezo a dar pequeños golpes al teclado, pequeños golpes cargados de fe y de esperanza. Pero, no me puedo dejar guiar por la emoción. Cada palabra, cada verbo y oración deben SIEMPRE estar contextualizados bíblicamente, esa también es mi responsabilidad.

Cada día que pasa… Cada instante que el Señor me da para compartir sus muchas bendiciones. Y es que, siempre encuentro una buena excusa, un motivo que me sirva para decirle al mundo que sin JESUCRISTO, nada.